En el fin del mundo, sobre la roca más alta de una isla diminuta, se alza un faro. Se construyó para que durara siempre. Ilumina el mar con su luz y guía a los barcos en la travesía. Así comienza este precioso libro, que es una obra de arte y un homenaje a una profesión -la del farero- que fue tan importante. La historia narra la vida de un farero y su familia frente al mar calmado, tormentoso, bravo, inesperado, mágico.