Al salir de clase están todos muy alborotados. Es la fiesta de cumpleaños de un compañero, pero hay alguien que no está invitado… Descubrir que no estás invitado a un cumpleaños puede ser motivo de tristeza. ¿Cómo afrontar el hecho de sentirse excluido? Esta mágica historia nos ayuda a entender que no podemos tener todo, y que a veces no tenerlo puede resultar positivo.