Florencio, el rey de la selva, despierta un día con picores en la cabeza. No consigue calmarlos rascándose, ni siquiera cuando su señora y sus cachorros le ayudan. Florencio comienza entonces un viaje para buscar remedio. Los más diversos animales de la selva intentan acabar con sus picores, pero sin éxito. Por el camino incluso un mono queda enredado en la abundante melena del león.