Todo empezó el día en que Paula decidió decir que no. Decir que no era genial. Paula podía hacer lo que quisiera. Pero entonces sucedió lo inesperado: su casa se convirtió en una auténtica selva con árboles, lianas, vegetación frondosa y todos los animales campando a sus anchas. Una cautivadora historia sobre lo que sucede cuando los niños desafían a los adultos.