Hay tardes sosas, tediosas, soporíferas, pesadas, inapetentes, interminables, desesperantes, terriblemente aburridas, ¿o quizás no? Una tarde terriblemente aburrida para unos puede en algo divertidísimo y excitante para otros. Raquel Bonita juega con el lector en este álbum para pequeños a partir de 3 años: ¿Quién se aburre, quién se divierte? ¿Las tardes aburridas no pueden ser salvajemente divertidas? Todo depende de la actitud y de las ganas por que sean de una u otra forma.